viernes, 2 de mayo de 2025

Japón en la carretera - Volviendo a Tokio

Hoy fue un poco día de transición y hay pocas fotos. Nos levantamos tras haber dormido de futón. Nos cuesta acostumbrarnos a él, y yo creo que dormimos algo peor. Pero por lo demás el hotel fue bastante aceptable (Manazuru Marin Hotel). Limpio, tranquilo, y con desayuno tradicional. La única mini pega es que no hay ducha en la habitación, es onsen si o sí. A nosotros no nos parece mal en absoluto, la rutina del onsen es maravillosa y te deja muy relajado, pero si tenéis tatuajes no esta permitido usarlo o si os da cosa estar en pelotas en frente de otra gente, mejor un hotel con ducha en la habitacion.


Bajamos a desayunar a la hora que nos mandó el hotel. Es otro detalle, son un poco pejigueros en algunos hoteles  con las horas del desayuno porque son elaborados. El desayuno, estupendo. Un desayuno de esos que tienen de todo, incluyendo pescado a la parrilla, que no falte en un buen desayuno tradicional.



Como el día estaba algo feo, decidimos irnos directos a Tokio. Teníamos unas dos horas por delante y por el camino, nuestra amiga japonesa nos dijo "¿os importa si vamos a comprar unos mochis a un sitio?". Había que desviarse algo, pero realmente nos daba igual. Así que acabamos volviendo a la zona de Hakone, a un sitio de dulces tradicionales llamado Chimoto. Llovía y estaba el tráfico complicado, pero tras aparcar en el pequeño parking del sitio, paramos un buen rato a tomar un té con dulces. La verdad es que era lo que mejor entraba con este tiempo.


Desde allí ya fue todo autopista hacia Tokio. Cuando estábamos llegando a casa de nuestros amigos con el unico plan de comer y sofa, Bea decidió bajarse cuando pasamos cerca de Shibuya para irse de compras. Como hacía un día feo y las niñas estaban cansadas, pedimos algo de comida que no tardó nada. Nada japonés, por cierto, unas hamburguesas y un bocata de pastrami (con huevo!) En cuanto acabamos, dejamos a las niñas en casa y bajamos a entregar el coche de vuelta, sin más complicaciones. Llovía a mares, pero por suerte pudimos ir a junto de Bea sin mojarnos, porque la parada de metro estaba muy cerca del sitio donde nuestro amigo cogió el alquiler (Nissan Rent-a-car en Toyosu).

Cogimos el metro al encuentro de Bea, que estaba en Shibuya. Como llovía estuvimos los tres unas horas dando vueltas por centros comerciales de Shibuya. Bea está un tanto aburrida de ir de compras por Singapur, ya que en todos lados hay las mismas cosas, y esto es un soplo de aire fresco para ella. 

 


Cuando llegó la hora de cenar, volvimos al piso y estuvimos cenando pizza y bebiendo cerveza hasta que caímos rendidos y nos fuimos a dormir. Mañana, el último día completo en Japón.

 

No hay comentarios: